En FLEUR UNIVERSELLE, que contiene notas de Ron y Canela, el aroma de la arena cálida de Immortelle se intensifica por la frescura del grano de pimienta rosa y la frescura del cardamomo.
En 1900, en la Exposición Universal de París, René Lalique estaba en la cima de su carrera como joyero y apenas comenzaba a explorar una nueva faceta: trabajar con vidrio. Su entusiasmo por la renovación también se refleja en la fragancia de Immortelle, cuya flor se niega a desvanecerse.
En FLEUR UNIVERSELLE, que contiene notas de Ron y Canela, el aroma de la arena cálida de Immortelle se intensifica con la adición de especias frías: una fusión de Pimienta Rosa y Cardamomo. Basado en mirra, con acentos de vainilla, regaliz, haba tonka, amaretto y pachulí, tiene una fragancia a chocolate negro que junto al aroma del azúcar moreno de Immortelle, se hace aún más adictivo.