Cuidado de la piel
Doble limpieza facial
¿Más vale prevenir que curar? Sí, al menos en el caso de la doble limpieza. Aquí te explicamos cómo funciona exactamente este método de limpieza y qué productos necesitas.
Tu rutina de noche
Antes de irte a la cama, solo quieres desconectar, relajarte y no preocuparte por desmaquillarte. Lo entendemos... Sin embargo, se trata de algo muy importante si quieres tener una piel bonita y limpia al despertar. Aquí te contamos por qué debes desmaquillarte SIEMPRE, qué productos desmaquillantes son adecuados para tu tipo de piel y te explicamos paso a paso cuál es la mejor forma de eliminar el maquillaje de tu rostro.
¿Retirar la base, el corrector y los polvos por la noche? Muy pocas tenemos ganas de eso, especialmente en los días con mucho estrés o cuando nos acostamos a las tantas. Por supuesto, alguna vez puede pasar que simplemente te quedes dormida y a la mañana siguiente te despiertes totalmente maquillada y con «ojos de oso panda», porque la sombra y el eyeliner se han corrido. Sin embargo, te recomendamos que esto no se convierta en la norma: quedarse dormida sin desmaquillarse debe ser la excepción.
Quieres tener una piel bonita y limpia. Si dejas el maquillaje en tu rostro durante la noche, la piel no podrá regenerarse ni formar nuevas células. Por la noche, la base de maquillaje obstruye los poros: el sebo no puede salir y aparecen los desagradables granos.
Quieres una piel suave. Las bases de maquillaje especialmente densas con una gran cobertura pueden deshidratar la piel. Cuando te levantas después de una noche en la que has usado una base de maquillaje de alta cobertura, tu rostro suele estar seco. Además, a veces es posible que se formen escamas en la piel.
Quieres tener un aspecto joven. Si la base, el corrector y los polvos se quedan en tu cara, el colágeno de tu piel no podrá regenerarse correctamente. Como consecuencia, tu piel envejecerá más rápido y poco a poco irán apareciendo líneas finas y después arrugas más pronunciadas.
Quieres unas pestañas largas y rizadas. La máscara de pestañas crea un efecto voluminoso y seductor, pero también reseca las pestañas y las hace más quebradizas. Si duermes con las pestañas maquilladas, la posibilidad de que se rompan más rápidamente aumenta.
Quieres mimarte. La rutina desmaquillante de noche no solo es buena para tu piel, sino también para tu alma. Tras un día agotador, tómate unos minutos para mimarte. Así estarás perfectamente preparada para un sueño reparador.
Si quieres crear tu propia rutina desmaquillante personalizada, primero tienes que hacerte varias preguntas importantes: ¿Qué tipo de piel tienes? ¿Cuánto tiempo quieres invertir en desmaquillarte por la noche? ¿Qué importancia tiene para ti cuidar el medio ambiente al desmaquillarte? En función de si tu piel tiene tendencia a las imperfecciones, es seca o especialmente sensible, existen distintos productos adecuados para ti. Si te interesa el tema de «cero residuos», puedes elegir entre muchos jabones sólidos y otros pequeños utensilios. ¡Hay tanta variedad que ahí es fácil perderse! Por eso, te ofrecemos un resumen de todos los productos desmaquillantes más populares. Así, podrás crear una rutina desmaquillante de noche con la que cuidar tu piel y a ti misma.
¿Vas a ir directamente al gimnasio después del trabajo o la universidad y necesitas desmaquillarte antes? ¿O estás de viaje y buscas un único producto para desmaquillarte que elimine fácilmente el maquillaje de tu piel y al mismo tiempo la limpie y la cuide? ¡Entonces, las toallitas desmaquillantes son la solución correcta!
Este producto elimina el maquillaje y las impurezas de forma específica con solo una pasada. Para ello, solo tienes que sacar una toallita del paquete y pasarla por tu cara y tu cuello. En muchas ocasiones, ni siquiera tienes que aclararte la cara con agua, ya que las toallitas no dejan ninguna película grasa en la piel. Además, con ingredientes como, por ejemplo, el pantenol o la manteca de karité, le aportan hidratación a tu piel. Otros ingredientes activos como la vitamina E antioxidante actúan de forma específica contra los problemas concretos de la piel. En resumen, las toallitas desmaquillantes son pequeñas y prácticas superheroínas.
Una loción o leche limpiadora elimina la base de maquillaje, el colorete y otros residuos de maquillaje al tiempo que cuida la piel. Las lociones son especialmente nutritivas y contienen, por ejemplo, extractos naturales de rosa, jazmín o melisa. Por eso, son especialmente adecuadas para las pieles secas, normales o mixtas. Sin embargo, esta no es la única ventaja: estos productos disuelven el maquillaje y las partículas de suciedad sin irritar la piel gracias a su consistencia cremosa.
Además, son muy fáciles de utilizar: vierte un poco de leche en tus manos para que se caliente. A continuación, aplícala en tu rostro y tu cuello y masajéala suavemente para que se absorba bien. Al hacer esto, las sustancias nutritivas penetran en tu piel. A continuación, retira la loción con agua tibia o con un pañuelo facial junto con los restos de maquillaje.
La mayoría de aguas micelares no contienen ningún ingrediente que pueda irritar la piel. Por eso, son ideales para las pieles sensibles, irritadas y propensas a las rojeces o imperfecciones. Como su propio nombre indica, el agua micelar tiene una consistencia acuosa. Las micelas son moléculas hidrofílicas que disuelven fácilmente la base de maquillaje, el corrector y otros productos cremosos. Para ello, vierte una cantidad generosa de agua micelar en un disco de algodón y pásalo suavemente por tu rostro, realizando movimientos circulares. Atención: no frotes muy fuerte para no irritar innecesariamente la piel.
Las aguas micelares eliminan incluso el maquillaje de ojos difícil de quitar, como la máscara de pestañas y el eyeliner. Para ello, coloca un disco empapado en agua micelar sobre los ojos cerrados, presiona con cuidado y déjalo actuar entre diez y veinte segundos. Durante este tiempo, notarás cómo se disuelve la sombra y el resto del maquillaje. A continuación, pasa el disco de algodón con un movimiento y los restos de maquillaje se quedarán adheridos. Si es necesario, repite el proceso.
¿Tienes la piel grasa o con imperfecciones? Entonces, utiliza productos desmaquillantes como el gel y la espuma para desmaquillarte: eliminan la sombra de ojos, los polvos y el colorete de tu rostro sin dañar la piel. ¿Cómo funcionan? Estos productos tienen una base de agua que disuelve fácilmente el maquillaje ligero. A diferencia del aceite, el gel puede retirarse fácilmente con agua sin dejar ningún residuo o película en la piel.
Para desmaquillarte, haz lo siguiente: mójate la cara y, a continuación, aplica una o dos dosis de tu gel o espuma limpiadora. Al entrar en contacto con el agua, el producto genera espuma y el maquillaje en polvo se disuelve fácilmente. Masajea la espuma sobre el rostro para obtener un resultado de limpieza aún más profundo. Por último, aclara la espuma bien.
¿Quieres eliminar de tu rostro la base de maquillaje y los correctores de alta cobertura, así como las barras de labios mate de larga duración? Entonces, seguro que también conoces el problema de que los productos a base de agua tienen sus límites a la hora de desmaquillar. Sin embargo, los aceites de limpieza sí eliminan de forma efectiva los productos resistentes al agua. Importante para la aplicación: aplica el aceite limpiador facial sobre el rostro seco. Vierte dos o tres dosis en las manos secas y masajea el aceite en la piel.
Mientras vas distribuyendo el producto con movimientos circulares suaves, irás notando cómo se disuelve el maquillaje, incluso la máscara y el eyeliner resistentes al agua. En cuanto el maquillaje empiece a disolverse un poco, pon un poco de agua tibia en tus manos y aplícala en el rostro. Vuelve a masajear el producto: muchos aceites se convierten en una leche nutritiva al entrar en contacto con el agua. A continuación, enjuaga la cara con agua. El aceite limpiador facial es tan suave que es adecuado incluso para la delicada zona del contorno de ojos.
¿Quieres evitar los envases de plástico y reducir los residuos al desmaquillarte? ¡Sin problema! Para las amantes del maquillaje y del medio ambiente también hay una solución: los jabones especiales de limpieza facial vienen con un envoltorio de papel que a menudo es reciclado. Muchos jabones faciales de «residuo cero» contienen ingredientes naturales como la arcilla roja, la sal marina o el carbón activado, que exfolian tu piel al desmaquillarla. Para aplicarlos, mójalos con un poco de agua, forma espuma en las manos, masajéala en la piel con movimientos circulares, aclara los restos con agua y disfruta de una sensación fresca y limpia en tu piel.
Para reducir el número de residudos, puedes utilizar discos reutilizables o toallas de microfibra como alternativa a los pañuelos faciales y a los discos de algodón de usar y tirar. Utilízalos para eliminar suavemente los restos de maquillaje de tu rostro, y luego mételos en la lavadora. Estos productos te permiten desmaquillarte de forma efectiva e higiénica sin tener cargo de conciencia.
¿Te maquillas mucho y utilizas productos tanto en crema como en polvo? Entonces, nuestro consejo es que integres al menos dos productos de limpieza distintos en tu rutina desmaquillante. Un aceite limpiador y una leche limpiadora o un tónico eliminarán incluso el maquillaje de ojos resistente al agua, los labiales de larga duración y los restos de corrector más persistentes. Aquí te mostramos paso a paso cómo puedes eliminar de forma efectiva el maquillaje de tu piel por la noche.