Después de dos décadas, las de los 20 y 30 años, en las que el futuro profesional, el trabajo o los hijos ocupan casi el cien por cien del tiempo, hay que tomarse un respiro y dedicar unos minutos al día para el cuidado del rostro. Cumplir los 40 es dar el pistoletazo de salida a las primeras arrugas, a la aparición de manchas y a la pérdida de luminosidad. Pero no hay que deprimirse ¡tienen remedio!: los tratamientos anti-arrugas.

PLAN DE ATAQUE
Esta claro que la piel cambia con los años y que las hormonas no funcionan de la misma manera que cuando se es joven. Esto se traduce en sequedad cutánea y pérdida de colágeno y elastina, proteínas presentes en la piel que se encargan de que mantenga sus niveles de humedad y elasticidad óptimos.
Los tratamientos anti-arrugas contienen elementos que corrigen esta pérdida, proporcionando un aspecto saludable a la piel.
Estos son sus poderes:
• Ácido hialurónico: su función es hidratar, sujetar y defender los tejidos del ataque de los radicales libres.
• Extractos vegetales: activan las proteínas esenciales de la piel, que son las responsables de regenerar el tejido cutáneo y de darle firmeza.
• Colágeno: se encarga de mantener el tejido firme, evitando el descolgamiento facial y la aparición de líneas de expresión.
• Vitaminas: son los antioxidantes más poderosos que se conocen. Protegen frente a los radicales libres, responsables del envejecimiento prematuro; intervienen en la síntesis del colágeno natural y aceleran la reproducción celular de las capas superficiales de la piel.

ÉCHALES UNA MANO
Si quieres que estos tratamientos funcionen a pleno rendimiento, también debes poner algo de tu parte y seguir estas recomendaciones:
• Abandona el tabaco y el alcohol, aumentan la deshidratación de la piel.
• Exfolia tu rostro una vez a la semana para retirar las células muertas que restan luminosidad a la piel.
• Utiliza una mascarilla adecuada a tu cutis una o dos veces por semana.
• No te olvides de la protección solar aunque el día esté nublado. El sol es fuente de vida, pero envejece la piel.