La temporada de deportes de invierno ya está aquí. En la nieve y en las pistas te esperan temperaturas gélidas, vientos helados y un sol abrasador, que extraen la humedad de la piel, debilitan la barrera cutánea y favorecen la irritación. Descubre aquí cómo prepararte para la nevada.
Prevenir la deshidratación y quemaduras por viento
El aire frío, seco y falto de oxígeno de la montaña deshidrata la piel y hace que parezca cansada rápidamente. Los bálsamos y sérums nutritivos hidratan y una rica crema de día ayuda a prevenir las irritaciones causadas por el viento cortante.
Consejo: No olvides las manos y los labios
Están especialmente expuestas durante los deportes de invierno y, sin embargo, a menudo se olvidan: Las manos y los labios. Las fórmulas de cuidado nutritivas protegen las zonas sensibles de la piel para que no se agrieten. Especialmente importante en unas vacaciones de esquí: ¡protección solar para los labios!
Atención a la protección solar
En la alta montaña, la radiación UV es más intensa y la nieve refleja aún más la luz solar. Por lo tanto, la protección solar con FPS 30 o 50 y la reaplicación periódica son imprescindibles cuando se esquía.
Tómate tiempo libre para cuidarte
Un día en las pistas es agotador. Por la noche, mima tu cuerpo con un aceite corporal calmante para relajar los músculos. A la mañana siguiente estarás maravillosamente fresco y listo para una nueva aventura de deportes de invierno.
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