Aceites vegetales
Aceite de argán
El aceite de argán también recibe el nombre de oro marroquí. Este aceite tan elaborado también puede ser valioso para el cuidado de la piel.
El aceite de ricino se ha hecho un hueco como aceite para el cuidado de la piel y el cabello en muchas rutinas de belleza. El aceite del árbol del ricino ejerce un efecto de cuidado e incluso curativo. ¿Pero puede hacer milagros en el cuidado corporal? Esta es la información más importante acerca de los efectos y la aplicación del aceite de ricino.
Información comprobada y recopilada en colaboración con la bioquímica Dra. Sarah Schunter, de Múnich.
El aceite de ricino, también llamado castor oil en inglés, se obtiene a partir de las semillas del árbol del ricino (Ricinus communis). El aceite de ricino, incoloro y a veces algo amarillento, se diferencia de otros aceites sobre todo en que es relativamente viscoso. El motivo es que prácticamente el 90% del aceite se compone de una grasa determinada (triglicérido): el ácido ricinoleico. Según la calidad y la forma de obtención del aceite de ricino, este contiene otras sustancias como ácidos grasos libres, esteroles o vitamina E en cantidades variables. Con frecuencia se encuentran indicaciones que atribuyen al aceite de ricino un contenido especialmente alto en vitamina E. Pero de hecho, el contenido de vitamina E (aprox. 400-500 mg/kg) no es más alto que en otros aceites vegetales semejantes como el aceite de argán , de marula o de almendra .
El aceite de ricino no es apto para ser ingerido. No solo tiene un sabor desagradable, sino que además tiene un efecto laxante (si se toman entre 10 y 30 ml de aceite de ricino). En medicina, el aceite de ricino se utiliza con frecuencia como transportador de otras sustancias. El aceite de ricino también juega un papel en dermatología: dado que puede penetrar bien en los intersticios del estrato cutáneo, se utiliza p. ej. en el tratamiento de las siguientes afecciones cutáneas:
El aceite de ricino de prensado en frío se puede utilizar para cuidar y alisar la piel, el cabello, las pestañas, las cejas y las uñas. La aplicación y los efectos del aceite de ricino en detalle:
Los aceites para el cuidado son un complemento ideal para la rutina del final del día. Aplicar unas gotas de aceite de ricino a la cara y masajear. Esto puede hacerse después, antes o durante el tratamiento hidratante, dependiendo de las propias preferencias. En cualquier caso, debes asegurarte de combinar siempre aceite y producto hidratante, pues un tratamiento solo con aceites no es suficiente. Si a la mañana siguiente quedaran restos de aceite, puedes sencillamente lavarlos.
Como casi todos los aceites, el aceite de ricino también puede volver la piel suave, regenerarla y cuidarla. Una piel cuidada siempre se ve menos seca o áspera y aparecerán menos pliegues y arrugas. De ello se desprende que la aplicación de aceite de ricino es un tratamiento antienvejecimiento activo y que puede ejercer un efecto contra los pliegues, las arrugas, las manchas y también contra los granos o las ojeras. Pero aunque el uso de aceite de ricino representa un complemento acertado, en la cosmética hay alternativas más efectivas para los casos mencionados. Estas incluyen por ejemplo el retinol , la vitamina C , la niacinamida o el ácido acelaico.
Además del uso de aceite de ricino puro, este también se incluye como ingrediente cosmético en diversos productos para el cuidado de la piel.
El aceite de ricino le da un brillo suave a la piel, por eso se encuentra con frecuencia en los productos para el cuidado de los labios como bálsamos labiales, brillo de labios y barras de labios. Si bien es posible aplicar aceite de ricino puro a los labios, el sabor es bastante desagradable, aunque muy discreto.
El aceite de ricino se puede aplicar sobre las pestañas con un cepillo. Pero cuidado: si se utiliza por el día, el aceite de ricino puede influir en la duración de la máscara. Por eso es preferible usarlo sobre todo al final del día y durante la noche. A la mañana siguiente se quita el aceite restante con una toallita facial.
En los últimos años, el aceite de ricino se ha hecho notar como alternativa a los sueros para pestañas convencionales (con prostaglandinas). Se considera que el aceite de ricino estimula el crecimiento de las pestañas y cejas y que hace que el pelo se vea más negro. Esto se confirma a menudo comparando el antes y el después de una aplicación de aceite de ricino. Los pelos se ven más oscuros tras aplicar aceite de ricino sobre todo debido al efecto de cuidado y al brillo. Normalmente, unas pestañas y cejas más largas y gruesas suelen ser resultado del tratamiento de cuidado y no se pueden atribuir a un crecimiento más fuerte.
Por cierto: no debes preocuparte si te entra aceite de ricino en el ojo. Es completamente inocuo, el aceite de ricino se encuentra en productos como los colirios.
El aceite de ricino sirve para cuidar el cabello seco, quebradizo o deteriorado, pero también una piel seca. Para ello, lavar el cabello de la forma habitual y a continuación masajear el cuero cabelludo y el pelo con unas gotas de aceite de ricino. Dejar actuar durante unas dos horas o toda la noche y después lavar con un champú para quitar el aceite.
Este tratamiento puede tener un efecto positivo en la longitud del pelo, pues un cabello bien cuidado es menos propenso a romperse o a que se abran las puntas. Pero esto no significa que el aceite de ricino estimule activamente el crecimiento del cabello o que tenga un efecto sobre la fase de crecimiento.
¿Uñas quebradizas, cutícula agrietada? Masajear con aceite de ricino las uñas y la cutícula y dejar actuar durante 20-30 minutos o toda la noche. Quitar el aceite sobrante con una almohadilla de algodón. Si se realiza periódicamente, este cuidado puede suavizar la rigidez de las uñas y la cutícula.
El efecto positivo del aceite de ricino en las pestañas y el pelo se debe a sus propiedades beneficiosas. Al usarlo, las pestañas y el cabello se ven más largos o incluso pueden alargarse. No obstante, el aceite de ricino no influye de forma activa en el crecimiento de las pestañas o del cabello.
La medicina natural utiliza el aceite de ricino para tratar las verrugas. La efectividad del aceite de ricino en este contexto se deduce sobre todo de observaciones empíricas, las pruebas científicas son escasas. Quienes estén aquejados de verrugas u otros apéndices de la piel deben consultar a una dermatóloga o un dermatólogo para recibir una ayuda mucho más metódica y efectiva.
El aceite de ricino en sí no es tóxico. No obstante, en la elaboración del aceite se produce ricina, que es altamente tóxica y ricinina, algo menos tóxica, también resulta un subproducto en forma de alérgeno. En cualquier caso, estas sustancias no se encuentran en el aceite elaborado, ya que se separan en el proceso de prensado y extracción del aceite.
"Quien entiende cómo actúan las sustancias cosméticas, ya ha dado el primer paso para un cuidado efectivo de la piel", declara la doctora Sarah Schunter. Como bioquímica doctorada, desentraña con placer las listas de sustancias de los productos cosméticos, que a menudo son crípticas: qué es lo que llevan y qué efecto tienen. Señala convencida: Con estos conocimientos se puede determinar el cuidado adecuado para cada tipo de piel y cada afección cutánea.