Los nutrientes de los pétalos de caléndula penetran en la piel como el aire, hidratándola y calmándola durante mucho tiempo. La adición de agua de caléndula proporciona una energía profunda e hidratante independientemente del tipo de piel. La caléndula limpia la piel, la protege contra las irritaciones y estimula la regeneración epidérmica. La betaína que contiene la crema proporciona hidratación, ayuda a controlar el equilibrio agua-grasa y evita que la piel se reseque. La textura ligera y no pegajosa de la crema permite que se absorba rápidamente sin sensación de pegajosidad.