Controla tu brillo y minimiza la grasa en la zona T de tu rostro. Los polvos faciales de maquillaje son uno de los productos indispensables que no pueden faltar dentro de tu neceser.
Junto a los polvos compactos, este producto cosmético te ayuda a sellar tu maquillaje y conseguir ese efecto deseado durante mucho más tiempo. Con la ayuda de Douglas puedes aprender los diferentes usos de los polvos faciales sueltos y cómo aplicarlos correctamente en tu rostro.
Los polvos sueltos están diseñados de una textura ligera, por lo que es necesario que se apliquen con brochas de rostro gruesas y suaves. Su objetivo principal es reducir y eliminar el exceso de brillo que se genera en la zona T (nariz, frente y mentón) al aplicar tu maquillaje facial.
A diferencia de otros productos de cosmética, este tipo de polvos ofrecen una mayor cobertura y un efecto leve, unificado y más natural. Se utilizan tras aplicar la base de maquillaje y son ideales para dar ese toque final a tu makeup en las pieles grasas o mixtas.
Sus fórmulas a base de minerales y libres de químicos permiten suavizar la textura de la piel ofreciendo un toque de color.
Además de utilizarse para conseguir un perfecto acabado, los polvos traslúcidos se pueden aplicar para:
Según las necesidades de cada piel y el efecto que se desee conseguir es necesario recurrir a un tipo de polvo suelto u otro:
Los polvos sueltos se aplican directamente en la dermis una vez hayas finalizado tu maquillaje. Siempre utilizando brochas adecuadas para ello y mediante pequeños movimientos circulares en la zona T. De esta manera, se podrá fijar rápidamente la base de maquillaje y unificar el tono de la piel.
Ahora puedes conseguir un acabado y un look profesional con la ayuda de los polvos sueltos traslúcidos. En la sección de maquillaje de Douglas tienes a tu disposición una colección de maquillaje de polvos, tanto con color como neutro, para que puedas escoger el que mejor se adapte a ti.
Combina este producto de cosmética con tus artículos de maquillaje habituales y obtén un efecto mucho más duradero en el tiempo.